Ante el malestar que parece iba a ocasionar mi voto negativo entre las personas que dirigen el partido que me presentó como candidato en las elecciones generales de 2011, tomé, aún a riesgo de violentarme yo mismo, pero fiel al principio médico del primum non nocere (en primer lugar, no hacer daño), la decisión de ausentarme de la votación, evitando incomodar y asumiendo la responsabilidad de este hecho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario