Visitas durante los

miércoles, 16 de enero de 2013

Eneas, Anquises y Ascanio: La cohesión social de Europa.


Europa logrará, con más o menos sobresaltos, consolidar la unión monetaria. Conseguirá impulsar, quizás con reticencias, una hacienda y fiscalidad comunes.
Esta estructura no es más que el instrumento, nunca el objetivo final, para lograr la Europa imaginada y, en cierta manera, puesta en práctica por los padres fundadores de Europa (Schumman, Monet, Adenauer y Gasperi).
El objetivo final no es otro que el que contempla El Tratado de la Unión Europea: “Promover el progreso social y económico de sus pueblos, con adhesión a los principios de libertad, democracia y respeto de los derechos humanos y de las libertades fundamentales y del Estado de Derecho, a los derechos sociales fundamentales”, tal y como se definen en la Carta Social Europea, de 1961, y en la Carta comunitaria de los derechos sociales fundamentales de los trabajadores, de 1989.
Para ilustrar esta idea de una Europa Social nada mejor que los versos del poeta Virgilio en la Eneida: “Sube en mis hombros, padre: a fe que mucha/No ha de serles la carga: en todo evento/Uno sea el peligro a entrambos; una,/O piadosa o adversa, la fortuna./Ascanio venga de su padre al lado”. Eneas sale de Troya llevando a su padre Anquises en andas y de la mano a su hijo Ascanio.
Solo seremos Europa si logramos, especialmente en estos momentos de crisis, sostener con decisión la cohesión social, con un sistema de pensiones que recompense en justicia a nuestros mayores y unas políticas educativas y de generación de empleo que ofrezcan futuro a nuestros hijos.
Es necesario desarrollar sistemas de justicia, reglas y leyes morales, que respondan a los desequilibrios sociales que hacen peligrar la vida de los individuos y del grupo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario